JESUS QUE TE MIRE MUCHAS VECES PARA DARME CUENTA DE LO QUE ME AMAS

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PULSAR Y RECITAR LAS ORACIONES Y LAS PROMESAS DE JESÚS

jueves, 21 de junio de 2007

EL QUE COME MI CARNE Y BEBE MI SANGRE TIENE VIDA ETERNA.





Mi carne es verdadera comida, y mi sangre es verdadera bebida

+ Lectura del santo evangelio según san Juan 6, 51-58

En aquel tiempo, dijo Jesús a los judíos:

-«Yo soy el pan vivo que ha bajado del cielo; el que coma de este pan vivirá para siempre. Y el pan que yo daré es mi carne para la vida del mundo.»

Disputaban los judíos entre sí:
-«¿Cómo puede éste darnos a comer su carne?»
Entonces Jesús les dijo:

-«Os aseguro que si no coméis la carne del Hijo del hombre y no bebéis su sangre, no tenéis vida en vosotros. El que come mi carne y bebe mi sangre tiene vida eterna, y yo lo resucitaré en el último día.

Mi carne es verdadera comida, y mi sangre es verdadera bebida.
El que come mi carne y bebe mi sangre habita en mí y yo en él.

El Padre que vive me ha enviado, y yo vivo por el Padre; del mismo modo, el que me come vivirá por mí.

Éste es el pan que ha bajado del cielo: no como el de vuestros padres, que lo comieron y murieron; el que come este pan vivirá para siempre. »

domingo, 10 de junio de 2007

¿QUE ES LA VIDA ETERNA, ADONDE VAMOS?




Jesucristo no ofrece amorosamente llevarnos a la vida eterna, y ora al Padre por esto, con el premio de podamos conocerlo, es decir estar cara a cara con Dios. El Evangelio según san Juan, menciona en diversos capítulos este deseo del Señor de llevarnos a la vida eterna. Para muchos de los que profesamos nuestra fe, o no nos resulta fácil creer de una forma tan simple en la vida eterna o comprendemos bien que significa, sin embargo es parte fundamental en nuestra profesión de fe, rezamos en el credo: Creo en el Espíritu Santo, la santa Iglesia católica, la comunión de los santos, el perdón de los pecados, la resurrección de la carne y la vida eterna. Amén

EL FIN DE LA VIDA TERRENAL, LA MUERTE.

Como sabemos, desde que somos concebidos en el vientre de nuestra madre, al final de nuestra vida terrenal, todos moriremos, es decir ninguno de nosotros se liberara de la muerte, es algo incuestionable, somos mortales. ¿Y que es la muerte?. En palabras simples, la muerte es el fin de la vida terrenal, e independiente de cualquier otra definición válida, este final nos produce un cierto horror, en especial si la vida nos parece muy bella.

Oramos por vivir, por nuestra salud, nuestro instinto de conservación nos domina, a tal caso que defendemos la vida, es un regalo de Dios. Es tal así, que no nos gusta pensar en la muerte, en especial, si esta es repentina o trágica, ahí, cesan todos nuestros proyectos, nuestras esperanzas e ilusiones. Lo peor es, si el proceso que nos lleva a la muerte es a través de un paso de dolorosa enfermedad. Entonces, vivimos luchando por vivir aquí en la tierra, consideramos la vida como don maravilloso y buscamos prolongarla, no queremos morir y estamos dispuestos a pasar por diversos padecimientos e incluso a desprendernos de todo lo que tenemos con tal de curar una enfermedad mortal.